Los tatuajes son una practica muy primitiva donde la piel de una persona es invadida con tinta para dejar plasmada entre sus capas una imagen o símbolo. Los primeros tatuajes no eran iconográficos sino que tenían en cuenta la totalidad del cuerpo y eran de características más ornamentales que iconicas. Las tribus indígenas y africanas que todavía continúan con el estilo de vida de sus antepasados son fiel reflejo del tatuaje como ornamento. Donde con cientos de pintos resaltas rasgos particulares de la misma figura humana. Los moros también tenían la costumbre en la época medieval de utilizar la tinta sobre la piel de la misma manera, existen retratos en oleo de la época que los muestran de esa manera.

Los hombres utilizaron la técnica del tatuaje para muchas eventualidades a lo largo de la historia. En el peor de los casos era la forma predilecta para señalizar a las culturas esclavizadas, por ejemplo los judíos del antiguo Egipto o los judíos en la Alemania Nazi. También por ejemplo con los galos y otras comunidades por parte de los romanos y los griegos. En muchos otros mejores casos, los tatuajes han servido como forma de identificación y han resaltado la hermandad entre los hombres.

En esta oportunidad tenemos una serie de ejemplos de tatuajes modernos que en dimensiones se consideran pequeños a los que se estila comúnmente. Respecto del genero, están pensados para hombres, pero no creemos realmente que sea un condicionante.