Los juguetes son una impronta más que especial de la vida, es realmente uno de los aspectos que más recordamos de nuestra infancia, todos tenemos siempre un juguete muy especial en nuestro recuerdo, que compartimos con un hermano, con una vecina, sin dudas esto adquiere mucho valor, y todo lo que es importante en la infancia sin dudas se trata de algo que se convierte en una verdad muy dificil de cuestionar después. Esto es una impronta más que especial para lo que sentimos.
Uno de los primeros juguetes que comparte todo el mundo, sea pobre, sea rico, sea mujer, sea varón, son los osos de peluche, o algún personaje de peluche. En las primeras instancias de la vida donde todo es muy sensorial, los osos de peluche tienen un lugar muy especial, porque se viven muy bien al tacto, y en este sentido, regalan mucho placer a los niños que los disfrutan simplemente por esas sensación suave que nos raen a las manos y al cuerpo, como también por esa emoción que surge de su apariencia agradable y amorosa.
Los osos de peluche son también siempre un grato regalo para lo que es el amor y la pareja.
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