Los videojuegos hoy son una forma de entretenimiento consagrada. Es imposible que durante el trascurso de un año no salga un titulo que trascienda todas las fronteras y sea parte de la cultura popular del mundo entero. Es verdad que no todos los juegos triunfan pero si es cierto que bastante seguido aparece uno que se convierte en una verdadera joya para los usuarios.
Este fue el caso de Minecraft, un juego al que ninguna de las empresas apostaba un centavo, ya que visualmente daba retro y se veía que recapitulaba muchas ideas de juegos anteriores. Lo que resulto ser una combinación más que exitosa, donde los usuarios se sintieron extremadamente cómodo e hicieron del factor pixel retro una propuesta estilistica cultural.
A esto le sumamos la increíble cantidad de mapas que se pueden crear libremente y la cantidad interminable de cosas que se pueden agregar. Éxito por donde se lo mire.
Los personajes propios del juego son contados, entre ellos uno de los más peligrosos es el famosos Creeper, un zombie de cuatro piernas que explota cuando se lo tiene bastante cerca, si uno pierde el camino a su hogar y se encuentra con uno de esto, no hay demasiadas chances de sobrevivir.
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