La decepción es una emoción muy común en la vida, todas las personas somos parte y vivimos alguna vez una decepción. La mejor de las veces cuando nos vemos decepcionados por algo o alguien, la peor de las veces cuando nosotros mismos somos el motivo de la decepción de otros.

En si misma, la decepción es el incumplimiento de una ilusión, de algo que deseábamos que fuese verdad, de algo que esperábamos que se diera. La mayoría de las veces nos desilusionamos con personas, pero a su vez la decepción puede venir de cosas, objetos y situaciones que esperábamos mejores. Nunca falta la situación que imaginamos como perfecta, y cuando ocurre nos vemos en la dificil iniciativa de aceptar que no fue ni cerca lo que esperábamos de ella.

Así, la decepción se transforma en una de las cosas que menos queremos para nuestra vida, aunque muchas personas lo adoptan como mecanismo para superar los problemas, esto puede ser una actitud nociva para la vida. La decepción en su instancia más aguda y critica se conoce como traición, a traición es una actitud dificil de revertir, cuando se utiliza este termino es porque la quebradura es profunda.

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